MANTENGÁMONOS LIMPIOS. No participes en pecados ajenos. Consérvate puro.  2 Timoteo 5:22 Un escritor que visitó una mina de carbón notó una planta perfectamente blanca que crecía junto a la entrada. El escritor y los otros visitantes que lo acompañaban se quedaron de que allí, donde el polvo soplaba constantemente y se posaba, aquella plantita fuse tan pura y tan blanquita. Mientras la gente observaba, un minero tomó un poco de polvo...