De tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Juan 3:16
Dios nos ha dado vida eterna; y esta vida está en su Hijo. El que tiene al Hijo, tiene la vida. 1 Juan 5:11-12
El gran donante
Al dar a su único y muy amado Hijo, Dios ofrece la vida eterna, pues él es la vida eterna.
- ¿Quién es el destinatario de tal donación? El mundo, es decir, aquellos que Dios ha amado desde el principio, sin excepción alguna.
- ¿Por qué Dios dio a su Hijo? Debido a su gran amor: "en esto se mostró el amor de Dios para con nosotros, en que Dios envió a su Hijo unigénito al mundo" (1 Juan4:9)
¿Quién es el beneficiario? "Todo aquel que en él cree".
-¿De qué manera ha dado Dios? Con toda libertad, de forma generosa y gratuita. “ Siendo justificados gratuitamente por su gracia..." (Romanos 3:24). "Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios" (Efesios 2:8).
Al dar a su hijo, supremo don, Dios nos "dará también con él todas las cosas..." (Romanos 8:32). ¿Cómo no poner nuestra confianza "en el Dios vivo que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos"? (1 Timoteo 6:17). Para proseguir en el camino, Dios nos da también su Palabra, la verdad (Juan 17: 14,17), a la que podemos recurrir tantas veces como queramos para aprender y recibir ánimo. Y para comprenderla, "Dios... nos dio su Espíritu Santo" (1 Tesalonicenses 4:8).
Así, en su infinito amor, Dios nos da su paz, su alegría, su amor y la esperanza de su gloria.
Lectura: 1 Samuel 28:15-29:11 - Mateo 22:1-22 - Salmos 19:1-6 - Proverbios 7:1-5.